La idea de montar una web paralela a la mía propia, como un yin y un yang, como espejos con las mismas secciones, es poder compartir contenidos que me interesan y que resuenan en mis propias producciones, las cuales son hasta la fecha, modestas.

Esta sección paralela se propone por tanto ir coleccionando contenidos y pensamiento dentro de los ámbitos intersticiales de la arquitectura, el urbanismo, el arte, las nuevas tecnologías, la ecología y las humanidades; una especie de cajón desastre de piezas que arman el mosaico global de mis pasiones, preocupaciones e intereses.

El deseo de compartirlo surge por dos motivos, uno, porque hace tiempo que vengo generando "archivo" personal, una especie de biblioteca que necesariamente hoy en día trasciende las estanterías físicas y necesita adaptarse a la vida "nómada", y una web parecía la solución perfecta para ello; y otra, por un compromiso personal con la sobreabundancia de contenidos e información, donde hoy la virtud está más bien en seleccionarlos.

Muchas veces esperamos que algo que nos gustaría que existiera, aparezca, quizá creado por otra persona, por ahorrarnos el esfuerzo. El caso, es que algo como lo que quiero ir construyendo en esta página me gustaría que existiera ya, y poder beneficiarme yo de ello. Después de bastante tiempo, he aceptado que este era "mi libro" y que debía escribirlo yo, pero no por eso significa que sea sólo mío.

Es un acto de apertura, de cierta exposición de mis gustos, pensamientos e ideas, y que además requerirá de abundante tiempo y dedicación paralela a mis actividades "remuneradas". Insisto en su ADN 100% altruista, y en su carácter colaborativo y abierto: casi todo lo que aparece aquí me lo recomendó directa o indirectamente alguien a quien siempre estaré agradecida, por lo que a lo largo del proceso, y en todas las secciones, existe un formulario para proponer contenidos e ir complejizando y enriqueciendo colectivamente este proyecto de vida.

He decidido inaugurar primero esta sección antes que mi propia página web, ya que en las circunstancias actuales considero muy necesario insistir en lo colectivo y en compartir intereses, creo que es una de las vías que permitirá un mayor florecimiento humano una vez superemos esta crisis del COVID-19, la cual, en mi opinión, solo ha servido para visibilizar con más énfasis otra más grande: la crisis humana y civilizatoria en la que ya estábamos inmersos.